miércoles, 29 de junio de 2011

La NASA busca explicación a este asombroso milagro.



...de repente una Hostia, escapándose de las manos del Sacerdote y volando por los aires, fue a parar a la boca de Imelda, que lo recibió y comulgó con gran alegría. Tenía tan solo cuatro años.

11 comentarios:

Ricky Mango dijo...

Efectivamente, es un caso muy raro. Hace ya muchos años que nadie da una Hostia a un niño. Mira a ver si en ese mismo libro encuentras algún milagro en que hayan dado una Hostia a algún padre por no darle una Hostia a su hijo cuando éste la estaba pidiendo a gritos.

ella dijo...

Rick, a saber. Espero que los especialistas en alta educación estén debatiendo el asunto...con permiso de dios y de la NASA.

Sun Iou Miou dijo...

Veo que Rick ha tomado el asunto por el mismo lado que yo, porque la historia (verídica, nadie lo duda) dá juego.

A lo que yo iba, no me extraña nada que la pobre criatura se muriese a los doce años, recibiendo una hostia diaria. Como cambian los tiempos... Hoy el caso estaría en los Servicios Sociales.

Anónimo dijo...

Has pensado en ponerle música a esta sección?
Sofía

ella dijo...

La verdad Sun Iou, no sé desde cuando nuestro idioma empezó a cambiar el "dar golpes" (pegar) por "dar hostias" . Tiene miga la cosa.


Sofía, pensaré tu propuesta de poner música a esta sección, de hecho se me ocurre algo...

Amio Cajander dijo...

No será la primera ni la ultima en recibir una hostia que venia volando y en principio no era para ella

condado dijo...

Mira de dónde viene la expresión: Ahí va la ostia...
Se me ocurre a mi que, pobre chaval...

ella dijo...

Ya veis, Amio, Condado, hasta hace poco recibir hostias era síntoma de santidad. ¿Y ahora tambien?

Jonas dijo...

Por respeito, devo-te a verdade.
Sempre. E assim sendo, devo avisar que os textos religiosos não 'devem'ser interpretados no seu sentido literal, mas aplicando-lhes uma pneumatia que só a Exegese consegue. Pois.
Em resumo, recorrendo aos meus parcos conhecimentos de exegese e também de hermenêutica dos textos sagrados, tenho a avisar que tal relato se refere a uma experiência de um padre pedófilo que ia 'fazendo filmes pornográficos' com uma menina de 4 anos, enquanto destribuía as hóstias às beatas velhas.
Claro que a menina (putativamente santa como todas as outras vítimas destes energúmenos), acabou por morrer com 12 anos, precisamente na idade em que, muito provavelmente, estaria razoavelmente lúcida para começar a 'dar com a língua nos dentes' e, logo, denunciar tais 'abusofrutos'...
Pois assim tudo aconteceu, podes crer, cara e inocente amiga Ella.
;)

ella dijo...

Esta interpretación do texto do meu libriño indica o alto nivel de coñecementos que sobre exegese e hermeneutica ten vostede amigo Jonas. Moi agradecida por aclararme as cousas. Non dubidarei en comentarselo á NASA e mesmo a Deus mesmo.
Pobre Imelda.

Anónimo dijo...

ja, ja, lo que da de sí esta sección...
Sofia