
Ya entonces estaba previsto. Y el flujo intemporal del proceso se cumplió a cada instante.
Ahora se acaba de pronto, sin avisar.
Apetece repasar acontecimientos remotos, ponerlos en orden.
Mi vida laboral como un río sin puentes, todo seguido hasta el mar, donde se fundirá con el resto de las aguas, libre al fin, gota anónima entre las mareas y las olas.
Celebrad conmigo la vida de artista en libertad.
9 comentarios:
¡Albricias!
Y bienvenida.
43 años ininterrumpidos de función
Felicidades, doña! Qué envidia insana la mía.
Querida Ella, ponga un día para celebrar (invito yo), pero, eso si… llámeme por teléfono que los he perdido todos (perder un móvil es el altzheimer de estos días)
queridos, en breve haremos una juntanza con piano para celebrar. Pero de momento sólo lo saben ustedes.
Llamaré
Enhorabuena!
Un abrazo
Ella, enhorabuena. Esas aguas tuyas que dices que se confundirán en el mar con otras aguas, será porque sabes que allí están las mías, esperando por las tuyas. ¡Ya era hora de que nos juntáramos y creáramos el caudal más feliz del océano. Venga, ahí te espero para cuando te vea llegar. Minervina.
Minervina, Ya me queda poco. Que sea un mar de champán.
Felicidades!!! Me encanta tu manera de recibiresta nueva etapa. Y tus bellas palabras para enriquecerla.
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