martes, 1 de enero de 2013

Noticia del Certamen Universal de Filadelfia en 1876, Madrid, tipografía y estereotipia Peroj, 1878 (UCM: D 061.41 (73) ALF)

Página 610


El pabellón de las mujeres “más por lo que significaba que 
por lo que exponía, era una de las principales curiosidades del certamen 
de Filadelfia”… “Extendíanse en su interior manifestaciones 
múltiples del trabajo y el ingenio mujeril, particularmente labores y 
bordados en todas sus fases…” “El local se había erigido con 
ayuda de los 30.000 duros recaudados entre mujeres del país 
[EEUU]”… “Pero lo más trascendental, lo más grave del asunto, lo 
que en aquel país daba al pabellón de las mujeres más proporciones 
morales que todo el resto de la colosal Exposición, fue que las 
norte-americanas, no contentas con ejercer por gracia de las leyes y de 
las costumbres la influencia y el poderío social; de alzarse 
constantemente sobre los hombres; de asumir la representación 
agradable, culta y privilegiada; de gozar, en fin, de igual, de 
exactamente igual libertad que los hombres, pero con más franquicias; 
no contentas con esto, repito, daban osadamente el primer paso en el 
camino de la emancipación; se juzgaban en su soberbia, aptas para hacer 
rancho aparte; prescindían de su compañero, olvidaban al padre, 
desdeñaban al hijo, se reían del amante, e instituían una sociedad, 
recaudaban unas contribuciones, erigían un capitolio mujeril, 
substituían la actividad masculina en todos sus ramos, se rebelaban, se 
aislaban, se mantuminían del amor y demostraban, o pretendían 
demostrar, la mayor de las locuras o el mayor de los absurdos: -que en 
los Estados Unidos llegan a parecer cordura y realidad- que no necesitan 
del hombre.”

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Ella, hija mía, yo creo que esas mujeres no saben que nuestro papel en este mundo ,creado por la divinidad, es complementar el papel del hombre porque de otra manera no llegará este mundo a ninguna parte. No seas feminista y no divulgues estas cosas pecaminosas que pueden hacer pensar a alguien que estamos aquí para otras cosas que las que hemos ejercido hasta hace poco.
¡Mujeres!. Besos femeninos a todos y perdonad a Ella que nos insta a cambios poco procedentes. Minervina.

ella dijo...

Eeeehhh!!! que no soy yo la que lo dice, eran otros tiempos (1876) pero ya hemos vuelto al redil, sobre todo en India, Afganistán, México...donde es legal lapidar, violar, matar, prostituir, humillar, sin que pase nada.

Anónimo dijo...

Te veo presta a la Revolución en todos los campos y no me resisto a profundizar. De todos modos acabaremos pasando.
Sofía

1892. 16 de octubre. Casi anteayer

Nota en el periódico Faro de Vigo:
“La mujer del profesor Sainio de Helsingfors (Finlandia) ha sido condenada a la hoguera, con arreglo a las antiguas leyes finlandesas, por haber asesinado a su marido; y aún cuando interpuso apelación de la sentencia, el Senado finlandés la ha confirmado, agravándola además, pues dispone que primeramente le sea cortada la mano derecha en la plaza pública, y después quemada viva. El Emperador Alejandro tiene el derecho de gracia; pero, si no hiciera uso de esta facultad, se podrá presencias un espectáculo digno de la Edad Media”

Ricky Mango dijo...

Nos han convencido de que la libertad es la última etapa de un proceso unidireccional, pero la libertad no es más que un efímero equilibrio sobre una cuerda floja.

Carpe diem.

Jonas dijo...

Sinceramente, fiquei impressionado com aquele agravo da pena: cortar uma mão e só depois ser queimada na fogueira.
Lembrei-me de quando caçava gazelas nas selvas africanas:
Com uma catanada cortavamos-lhes as patas, para não fugirem, e logo depois a churrascada...
Que raio de destino-gazela este, o de tantas mulheres, ainda, no século XXI...
E logo agora o caso da India, como que para que nunca nos esqueçamos de que Idades Médias há muitas...em perigosas lactências...

Força, Ella. Que nunca se te cansem as mãos para tais libelos...

Jonas dijo...

Sinceramente, fiquei impressionado com aquele agravo da pena: cortar uma mão e só depois ser queimada na fogueira.
Lembrei-me de quando caçava gazelas nas selvas africanas:
Com uma catanada cortavamos-lhes as patas, para não fugirem, e logo depois a churrascada...
Que raio de destino-gazela este, o de tantas mulheres, ainda, no século XXI...
E logo agora o caso da India, como que para que nunca nos esqueçamos de que Idades Médias há muitas...em perigosas lactências...

Força, Ella. Que nunca se te cansem as mãos para tais libelos...