sábado, 22 de diciembre de 2012

Este otro mundo es posible


Dentro de poco fusiles reciclados convertidos en trombones. Ya hemos empezado. 

Y luego tendréis que dejar de repartiros el mundo y de competir como adolescentes y tendréis que crecer como músicos, en armonía contigo mismo y con los demás, conciliando contrarios (dijo Aristóteles) y amando .
Y dejar de ser paternalista y socarrón con la sabiduría de las mujeres. 

Y las mujeres pintadas como monas o sin pintar, con tacones o deportivas, no querrán ya ser soldados ni ministras, quizá maquinistas de trenes de alta o baja velocidad llevando alimentos e instrumentos musicales aquí y allá. 




7 comentarios:

Ricky Mango dijo...

Muchas gracias, doña Ella. Ha dado usted exactamente en el clavo. Y es que (el amor a) la música es seguramente la única y la mejor competidora de las religiones. La música es capaz de sacar lo mejor de nosotros mismos. Es un recordatorio de que la armonía entre los seres humanos no es una utopía descabellada.

Ahora sólo falta aficionar a los políticos y a los banqueros a interpretar a Bach en el parlamento y en los consejos de administración. Respectivamente, quiero decir.

Amio Cajander dijo...

UN ABRAZO !

ella dijo...

Señor Ricky,usted no entiende que de lo que se trata no es que los políticos y banqueros interpreten a Bach, sino de que no haya políticos ni banqueros, solo mujeres llevando el mundo como su casa.

Anónimo dijo...

Ella, ese día en que el mundo esté en manos de mujeres yo ya no estaré. Siento perdérmelo pero habrá que procurar que la asignatura de "religión" no se imponga en las escuelas como materia obligatoria porque, a partir de ese momento, volverán a hacernos creer que nuestra obligación es tener muuuuuuchos hijos para el cielo. Total, que se habrá acabado tu sueño. Besinos navideños. Minervina.

Sun Iou Miou dijo...

Pues como me toque llevar a mí el mundo como llevo mi casa, vamos aviados, digo, derechitos a la ruína total nos llevo. Espero mucho que los que lleven el mundo sean gente, independientemente de que lleven más o menos equis en los cromosomas.

ella dijo...

Sun Iou, yo desde luego que no sé cocinar pero la historia que estoy contando es otra.

Anónimo dijo...

Si todos hubiéramos sido músicos o gatos, el mundo sería mucho más justo, más inteligente, menos beligerante y más honrado.
Como ya hemos nacido, no somos gatos, seamos músicos o al menos escuchemos la música; así nos hubiéramos ahorrado las matanzas, el III Reich, las guerras todas, hasta las galácticas, no andaríamos deseando lo que no nos corresponde, ni humillando a todo el mundo y seríamos más felices.
¡¡¡Feliz 2013 for everybody!!!
Atreyu