jueves, 5 de abril de 2012

Si tu estás conmigo.

Bist du bei mir, geh ich mit Freuden
zum Sterben und zu meiner Ruh.
Ach, wie vergnügt wär so mein Ende,
es drückten deine schönen Hände
mir die getreuen Augen zu

7 comentarios:

Sun Iou Miou dijo...

Qué cosas nos pone usted.

Si estás conmigo, me voy contento
a la muerte y mi sosiego.
Ay, que dichoso sería mi fin
si tus lindas manos me cerrasen
los ojos confiados.

Ricky Mango dijo...

Hermosísima pieza. No sé si será el auge de la ópera en los últimos tiempos, pero últimamente los cantantes se empeñan en cantar los temas líricos (e incluso los temas pop) como si fueran dramáticos, con unos gorgoritos y unas efusiones impropias de su género.

A mí, que la ópera me parece en el fondo una payasada, estas modas me dan dentera. Esta música es para cerrar los ojos y dejarse transportar a mares en calma, no a encrespadas olas de despecho, celos, ambición y otras gaitas. La ópera es la telenovela de la música clásica.

Podéis cubrirme de improperios. He abierto el paraguas.

Küsse

Ricky Mango dijo...

Sí, ya sé que es un aria de ópera, pero su espíritu y su letra son los de una cantata. No me puedo imaginar a una gorda vestida de romana cantándole esto a un tenor con una espada de cartón y un penacho en el cráneo.

Anónimo dijo...

Ricky, jajajaja, no quiero decir nada sobre lo que te he leído, pero que sepas que me he reído como una loca (¡Qué gracioso eres!) y ese segundo de risa maravillosa me ha justificado la tarde, jajajajaja. Por favor, entra más a menudo. Un beso, Minervina.

ella dijo...

Si estáis conmigo me siento dichosa.

ella dijo...

En 1725, J.S.Bach regaló a su segunda esposa Ana Magdalena una recopilación de piezas interesantes. Algunas compuestas por él mismo, otras por su hijo Carl Philip entonces de 11 años de edad) y de otros amigos músicos. Tambien las piezas que estaban de moda en Leipzig, la ciudad donde vivían entonces. La pieza nº 25 era el aria "Bei mir bist du". Durante mucho tiempo se atribuyó este aria a J.S.Bach pero en 2000 se encontró en el Conservatorio de Kiev el manuscrito de la ópera "Diomedes" de Stölzel que incluye este aria, estrenada en 1718 en Bayreuth . Es seguro que fue un aria "cuarenta principales" en su época y que Bach incluyó en el regalo a su amante esposa.

Solo una historia de amor.

Anónimo dijo...

Ella, historias de esas ocurren también en el mundo de la poesía con algún poema de atribución falsa. Y también se descubre, naturalmente. Minervina.