jueves, 29 de diciembre de 2011

1. MATINAR




Cuanta mugre, dijo Eufemiana. Se agachó, recogió del suelo el dedal y el periódico, y los tiró a la basura. Seguidamente, escribió esta historia en una cuartilla de papel (todavía no se habían inventado los ordenadores), la arrugó, la deslizó entre los troncos de la llar y, con una chispa que se encontró en el suelo, le prendió fuego. Quería evitar a toda costa que le dieran el premio. Cuando vio el crepitar de las llamas, sonrió satisfecha. Entonces se dirigió a la cocina, sacó el croissant y el joyero de la alacena, se preparó un café y, desperezándose, se sentó como todos los días a tomar su delicioso desayuno con diamantes.

Rick

4 comentarios:

ella dijo...

Primera entrega de nuestro amigo Rick.

Anónimo dijo...

Pues es bien agradable de leer, sí señor. Mi enhorabuena al señor RicK. Minervina.

Sun Iou Miou dijo...

¡Qué (buen) cumplidor! Yo todavía estoy matinando. Ando espesa pero algo saldrá, aunque sea mugre sin chispa.

ella dijo...

Queridos, yo también voy a matinar. Si me lo quereis enviar lo publico aquí y así todos leemos lo de todos y votamos al que desayune gratis. Los demás, desayuno virtual con mandarinas sobre mantelito portugués, y los que tengan cuerpo y ganas uno con churros en el café Gijón, como dios manda.